Normalmente,
la mayoría de avistamientos ovni, se suelen dar a mucha altura y son poco
objetivos, normalmente son luces en el cielo a miles de kilómetros de altura,
que objetivamente hablando, tienen poco peso a no ser que su trayectoria sea
“inteligente”, pero en ocasiones, esos avistamientos son muy radicales y transcendentes,
como el caso de José (nombre ficticio para preservar su identidad).